12 dic 2009

Gaticos





El aburrimiento es peligroso. Pero en algunos casos, como este, da como resultado algo original y divertido.
A Cardon Copy le dió por reformar los carteles de anuncios caseros
que ponían sus vecinos en la calle. Algunos son muy finos, otros no tienen sentido pero, desde luego, son mucho
más bonitos.

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